la cohesión profesional entre las distintas especialidades de intervención clínica y social permite fortalecer las actuaciones desde todas las áreas de intervención en la neurorrehabilitación, para conseguir los objetivos personalizados.
Ricardo
Almudena
Paula
Sergio
José
Beatriz
Acompañamiento al Neurodesarrollo
Nuestra metodología de trabajo apuesta por un enfoque global del niño que nos permita acompañarle a lo largo de su desarrollo con la indispensable colaboración de la familia y de otros profesionales o entornos, como el escolar.
Para ello, se realizan valoraciones especializadas que permitan conocer al niño y trazar los objetivos terapéuticos basándose en su nivel de desarrollo y sus potencialidades y en las prioridades del niño y la familia. De esta manera, se trabajan de forma conjunta las capacidades motoras, cognitivas y perceptivas, a partir de la interacción y las actividades terapéuticas guiadas por profesionales especializados.
A través del trabajo en consulta y las propuestas para realizar en otros entornos, se facilita el desarrollo integral del niño y la actividad familiar.
Mucho más que mocos…
La fisioterapia respiratoria está encaminada en mejorar el patrón ventilatorio del niño y en la prevención o tratamiento de las secreciones. Este trabajo se realiza a través de una serie de maniobras manuales (reeducación ventilatoria, drenaje autógeno, espiración forzada, ETGOL, tos dirigida y provocada…) e instrumentales (lavados nasales, aerosol terapia, acapella…). Durante los procesos infecciosos, si se interviene de forma precoz, se puede reducir la duración de la infección y previene las complicaciones.
Desarrollando Roles
Desde el área de Terapia Ocupacional acompañamos al niño a lo largo de su proceso de desarrollo, realizando un enfoque global en el que son claves la coordinación entre la familia y los profesionales de todos los entornos naturales del niño.
Realizamos una valoración especializada que recoge todas las áreas de desarrollo del niño (motora, cognitiva, socioemocional, comunicativa y adaptativa) que nos permiten establecer unos objetivos terapéuticos que permitan conseguir la máxima funcionalidad del niño según su etapa de desarrollo.
Se actúa a través de actividades significativas para lograr la máxima autonomía en las actividades de la vida diaria y conseguir que desempeñe su rol de niño con la mayor independencia posible.
Acompañamiento al Neurodesarrollo
Nuestra metodología de trabajo apuesta por un enfoque global del niño que nos permita acompañarle a lo largo de su desarrollo con la indispensable colaboración de la familia y de otros profesionales o entornos, como el escolar.
Para ello, se realizan valoraciones especializadas que permitan conocer al niño y trazar los objetivos terapéuticos basándose en su nivel de desarrollo y sus potencialidades y en las prioridades del niño y la familia. De esta manera, se trabajan de forma conjunta las capacidades motoras, cognitivas y perceptivas, a partir de la interacción y las actividades terapéuticas guiadas por profesionales especializados.
A través del trabajo en consulta y las propuestas para realizar en otros entornos, se facilita el desarrollo integral del niño y la actividad familiar.
Conducta y el cerebro
¿Cuándo acudir al neuropsicólogo?
El neuropsicólogo infantil es el profesional especializado en establecer las relaciones entre la conducta y el cerebro del niño teniendo en cuenta todas las variables biopsicosociales (cognitivas, psicológicas, familaires, escolares, y sociales principalmente).
La etapa infantil es una etapa de cambios cognitivos, psicoloógicos y sociales que cursa cumpliendo hitos en todas las esferas del niño, sin embargo existen algunas causas que pueden interrumpir o enlentecer su evolución como: mutaciones genéticas, procesos tumorales, infecciones víricas, accidentes cerebovasculares, traumatismos cranceoncefáicos, complicaciones en el parto, factores contextuales socio-familiares, etc.
Acudimos al neuropsicólogo cuando detectamos que el niño «se disteae con facilidad», «le cuesta aprender y va retrasado en el colegio», «es torpe en los deportes», «le cuesta establecer relaciones sociales con sus iguales», «grita y llora de forma descontrolada», » es impulsivo en sus tareas cotidianas, no planifica y es poco organizado», etc.
No todo es patológico. Desde IRN queremos que el papel del neuropsicólogo sea una ayuda en el camino del neurodesarrollo que acompañe a las familias a entender lo que está ocurriendo y que promueva al niño en su crecimiento potenciando sus capacidades.
Atención dirigida a aquellos mayores de 6 años que necesitan dar una continuidad a la intervención recibida en los servicios de AT de la Comunidad de Madrid, y que siguen necesitando tratamiento por parte de neuropsicólogos, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales y/o logopedas.
La hemiparesia es una condición neurológica heterogénea que afecta a un lado del cuerpo y puede producir debilidad, déficits en la sensibilidad, alteración del control motor, alteración del tono, limitaciones en el movimiento, dificultades motrices finas y gruesas, déficit perceptivos, problemas emocionales o dificultades de aprendizaje entre otros.
La parálisis braquial obstétrica (PBO) es una lesión en los nervios periféricos del plexo braquial (C5, C6, C7, C8 y T1), que afecta a la extremidad superior y sobreviene por un traumatismo producido en el mecanismo del parto. De otro modo, se puede definir como la pérdida de movilidad y/o sensibilidad en el miembro superior (brazo, antebrazo o mano) causada por una lesión de los nervios del plexo braquial en el momento del parto.
La parálisis cerebral infantil (PCI) es un grupo de trastornos que afectan la capacidad de una persona para moverse y mantener el equilibrio y la postura. Es la discapacidad motora más frecuente en la niñez. La parálisis cerebral infantil es causada por el desarrollo anormal del cerebro o por daño al cerebro en desarrollo que afecta la capacidad de la persona para controlar los músculos.
Las enfermedades neuromusculares engloban más de 150 entidades diferentes en las que se afecta alguno de los componentes de la llamada “unidad motora”, ya sea el músculo propiamente dicho (miopatías), el nervio periférico (neuropatías) o el trayecto del mismo desde la médula espinal hasta la unión neuromuscular (zona de unión del nervio con el músculo).
Se dice que un niño es prematuro cuando nace antes de haberse completado 37 semanas de gestación. Normalmente el embarazo dura unas 40 semanas. Los niños prematuros no están totalmente preparados para la vida extrauterina. Se enfrían con más facilidad y pueden necesitar más ayuda para alimentarse que los niños nacidos a término. Como su organismo todavía no está plenamente desarrollado, pueden tener problemas para respirar y sufrir otras complicaciones, como infecciones.